La diferencia entre si lo hace él, de manera gratuita y si lo hace el vigilante cumpliendo con sus funciones.
El precio de la agresión a una vigilante de seguridad de la estación de autobuses de Oviedo. 120€. (Para el agresor que la emprendió a patadas y puñetazos contra ella en la madrugada del domingo).
Un correctivo de 120 euros, que indignó ayer amargamente a la afectada y a los sindicatos, que la consideran “vergonzosa”, la víctima siente “indignación” e “impotencia” “hoy en día sale muy barato agredir a una persona” aun siendo ese profesional que vela por la seguridad de los demás.
Los vigilantes se sienten “vendidos” en determinadas circunstancias particularmente conflictivas en muchos servicios. Se demuestra de que el vigilante único va en contra de su integridad física y de la propia vida.
“Pero no carguemos las tintas contra el juez, que lo mas seguro es que esté aplicando la ley, a los que si que se les tiene que pedir responsabilidades, es al Poder Legislativo, y a los políticos que hacen la leyes y conseguir que la pena para el que agrede, no le salga casi gratis. Lamentablemente casos tenemos a diario.
Seguro que de haber sido a la inversa en un acto de auto defensa, el, o la Vigilante, estaría siendo viral en las redes, y calificado de acto de brutalidad del vigilante”.
Imagen publicada en el periódico digital,
María Antonia Celadilla, tras la cobarde agresión.
“Nos falta la fotografía del aguerrido y valiente agresor”.