La Fundación Prosegur y la Fundación Carmen Pardo-Valcarce han puesto en marcha un proyecto de digitalización documental para los diferentes departamentos de la empresa. Para ello, Prosegur ha contratado a un equipo de cinco jóvenes con discapacidad intelectual formados previamente por la Fundación Carmen Pardo-Valcarce para llevar a cabo este proyecto.
Además, estos trabajadores –Gema, Javier, José Ángel, Borja y María– cuentan con el apoyo de una coordinadora con discapacidad física, según señalan los promotores de la iniciativa.
Los nuevos empleados han recibido una formación especializada y adaptada en digitalización documental que analiza los conceptos y tecnologías implicados en este proceso, así como las herramientas y técnicas necesarias para llevarlo a cabo. Además de la formación teórica –con una duración de seis meses– el programa incluye prácticas en empresas y organismos públicos.
Este proyecto se enmarca dentro del convenio de colaboración alcanzado por ambas instituciones. Durante la firma, la presidenta de Prosegur y su fundación, Helena Revoredo, ha reiterado que “esta iniciativa manifiesta la responsabilidad y el papel fundamental que las empresas tenemos para contribuir al progreso de la sociedad”.
“Sabemos por nuestra propia experiencia que mediante el empleo podemos ofrecer un futuro más estable a uno de los colectivos con mayor dificultad de acceso al mercado laboral”, ha añadido.
Por su parte, para la presidenta de la Fundación Carmen Pardo-Valcarce, Carmen Cafranga, ha indicado que “ésta es la mejor manera de demostrar a la sociedad y a las empresas que las personas con discapacidad intelectual son igual de capaces de trabajar que cualquier otra persona”.
Dejar una contestacion