Empleados de Seguridad Integral Canaria (SIC) insisten en que nunca cobraron dietas, sino horas extras. Tal y como mantiene la acusación particular ejercida por la FTSP-USO, y la Fiscalía.
La segunda sesión se centra en las declaraciones de más testigos:
«Estábamos obligados a hacer horas extraordinarias a un precio por debajo de lo convenido».
Preguntado otro de los testigos por qué en el año 2009 cobró más de 25.000 euros en concepto de dietas y solo 15.000 de sueldo, lo explicó diciendo que a él le «gustaba comer» y si le apetecía cuando estaba trabajando «una langosta pues me la comía y luego le pasaba el ticket a la empresa». Algunos testigos justifican comidas en marisquería u otros gastos inverosímiles que nada tienen que ver con el salario de un Vigilante de Seguridad.
Otro testigo ha explicado que «SIC les pagaba el día 20 de cada mes «pero siempre faltaba dinero» y no cumplía con el convenio colectivo, así como que nunca cobró el plus de antigüedad ni de otro tipo».
Otro exempleado ha señalado al tribunal que, «si tenías que trabajar un día libre o hacer dos horas de más, lo apuntaban como dietas». Este trabajador por ejemplo, solía hacer unas 120 horas extras al mes, (algo totalmente ilegal según el convenio sectorial de seguridad privada) aparte de las 164 estipuladas de la jornada convenida en el contrato.
Otro testigo explica que en su caso «desconocía las condiciones del convenio del sector, pues solo se fijaba en la nómina porque necesitaba el dinero para mantener a su familia».
Si bien es cierto que no se han presentado todos los testigos convocados, recordarles que, ya sea en calidad de testigo, de acusado o de denunciante, estamos obligados a asistir al juicio una vez que el tribunal solicita nuestra comparecencia. No hacerlo puede suponer que el procedimiento siga sin que se protejan nuestros derechos y que tengamos que hacer frente a multas de hasta 2000 €.